miércoles, 30 de septiembre de 2009

CLORINDA MATTO DE TURNER EN INTERNET

152 ANIVERSARIO DE SU NACIMIENTO (2004)

Escribe : Julio Antonio Gutiérrez Samanez
En una entrevista con nuestro amigo el periodista Mario Carrión, en el Canal 9 de TV., el día 25 de octubre, recordando el 95 aniversario del fallecimiento de la insigne escritora cusqueña doña Clorinda Matto de Turner, dijimos, sin temor a equivocarnos, que “Clorinda era la intelectual peruana más importante de la historia universal”, ateniéndonos a la trascendencia de su obra, al impacto social que generó en su época y en épocas posteriores; al reconocimiento universal que logró, aún en vida, como escritora y periodista: Sola, viuda, perseguida, expatriada; por su vida valiente, serena, de luchadora tenaz, hasta el último día de su existencia. Todo esto hace de ella una heroína incomparable, en el terreno de la cultura, el periodismo, las bellas letras y la política que enaltecen, aun más, la grandeza de esta tierra epónima donde Clorinda vio la primera luz. Qué importa que la cucufatería ignorante y cobarde la haya insultado pidiendo que no regresase jamás a esta tierra que la aborrecía, pues ese aborrecimiento venía de la clase explotadora del indígena: los gamonales, y no del propio pueblo que, de tener las luces y conocimientos necesarios en aquellos álgidos momentos, la hubiera defendido con ardor y ungido como la mejor de sus defensoras y representantes.
Es cierto, también, y lo reafirmo ahora, que Clorinda, de no morirse tan temprano, a los 57 años, en Buenos Aires, hubiera alcanzado, con el brillo de su pluma y por la idoneidad de su carácter y militancia por la causa de la humanidad, el alto galardón del Premio Nóbel. Dicen que uno de los García Calderón, (enemigos acérrimos y gratuitos de Clorinda, por misoginia y envidia), había sido nominado para recibir tal galardón, cuánta mayor razón hubiera habido para entregársela a aquella escritora mártir que, con las agallas de una luchadora olímpica, se había abierto campo en el mundo y en la historia universal, luego de haber cuestionado y combatido valientemente las peores lacras existentes en el nuevo mundo: la explotación esclavizante del indígena y la simonía de los malos clérigos.
Parece increíble que en su propia tierra muchos la desconozcan, y aún repitan la monserga de que supuestamente trató de imitar a Palma en sus “Tradiciones”, cuando el propio tradicionista la llama su dilecta discípula, o de su supuesto ateismo y excomunión, etc. Como si se tratase de cualquier personaje venido a menos. A ellos, los invito a visitar la grandiosidad alcanzada por Clorinda en el medio globalizado, moderno y tecnológico por excelencia como es el Internet.
En efecto iniciamos por el buscador Google, y encontramos 5,560 páginas, entre las que se encuentren: biografías, monografías, estudios comparados, investigaciones, tesis de doctorado o maestría de las más importantes universidades del mundo; alusiones a la escritora y su obra en diccionarios, colecciones, crítica literaria, aportes de la mujer latinoamericana a la cultura, nuevas ediciones de sus libros, sus aportes a la causa de su género; catálogos de las librerías On line (o electrónicas) más importantes, etc., etc., etc.
Aquí exhibo una pequeña muestra de las cien primeras páginas tomadas al azar:
www.biografiasyvidas.com/biografia/m/matto.htm, www.evergreen.loyola.edu/~tward/mujeres/Matto www.uv.es/~fores/ClorindaMattoTurner.html ; enfenix.webcindario.com/literat/realismo/cmatto.phtml - 9k - www.fas.harvard.edu/~icop/maryberg.html; www1.universia.net/CatalogaXXI/C10010PPESII1/E138047; cervantesvirtual.com/FichaAutor. html?Ref=2931&portal=7;
www.girodivite.it/antenati/xixsec/-matto.htm; www.peruanita.it/personaggi/turner.htm; www.uv.es/~fores/ClorindaMattodeTurner.html; www.stockcero.com/book.php?ID=1614982119;
www.cusco-peru.org/cusco-peru/
cusco-cultural-casonas-cusco-casa-clorinda-matto.shtml; www.fetchbook.co.uk/search_Clorinda_ Matto_De_Turner/searchBy_Author.html;
www.babelguides.com/view/person/7421;
www.h-net.org/reviews/showrev.cgi?path=16685887233213; people.pwf.cam.ac.uk/hlm32/index1.html;
www.utexas.edu/utpress/books/matbir.html;
biblioteca.bib.unrc.edu.ar/completos/ corredor/corredef/comi-d/HINTZEGL.HTM;
members.cox.net/mcan2220/syllabus.html;
www.ibero-americana.net/cgi-bin/infodetail. cgi?isbn=8484890090&doknr=521009&lang=de&txt=inhalt ; www.samuelcavero.com/ensayos/ensay05.htm; www.oup.com/.../general/subject/LiteratureEnglish/ WorldLiterature/LatinAmerican/?view=usa&ci=0195110064; cvc.cervantes.es/el_rinconete/ anteriores/enero_01/10012001_02.htm; biblioteca.uprrp.edu/ banco%20de%20autores%20latinoamericanos-m.pdf; mujeres.universia.es/ocioycultura/escritoras.pdf; www.carleton.edu/curricular/ SPAN/classes/Spanish344/Spanish344.htm; www.caretas.com.pe/2000/1627/articulos/damas.phtml; universum.utalca.cl/contenido/index-01/hintze.pdf ; spanish.ucdavis.edu/people/FrontPage/faculty/Peluffo; romero_chumacero.tripod.com.mx/ laura.mendez.de.cuenca/id9.html; www1.universia.net/CatalogaXXI/ C10010PPESII1/S10327/P10395NN6/INDEX.HTML; enfenix.webcindario.com/literat/realismo/realismo.phtml; www.counciloftheamericas.org/ as/literature/br60turner.html; www.letras.ufrj.br/litcult/ revista_mulheres/VOLUME4/42_guardia.html; www.samford.edu/schools/artsci/ wlc/spanish/courses/span403.htm; www.hum.utah.edu/history/Courses/ PDF%20Syllabi/Fall%202000/WMST3960(Porter).html; www.hum.utah.edu/history/Courses/ PDF%20Syllabi/Fall%202000/WMST3960(Porter).html; www.rodopi.nl/senj.asp?BookId=TEORIA+21 ; web.presby.edu/lasaperu/nineteen.htm; www.rena.edu.ve/terceraetapa/literatura/novelas.html; www.h-net.org/reviews/showrev.cgi?path=20593896221141; www.uiowa.edu/~spanport/personal/DeMello/gdmCV1.htm; www.andes.missouri.edu/ andes/especiales/cb_crisis80.html; www.tau.ac.il/eial/VIII_1/berg.htm; www.bbk.ac.uk/lib/accessions/spancurr.html; depts.washington.edu/engl/ugrad/0001sems.html; www.counciloftheamericas.org/as/literature/br60.html; www.udl.es/dept/filcef/scriptura/indicen8y9.html - 8k; www.ardnamcatsprotection.co.uk/ Turner-Clorinda-Matto-De-Birds-Without-a-Nest-Tex-940-201-451-7.htmlwww.humnet.ucla.edu/spanport/ publications/Fall_2000.html - 28k; www.dartmouth.edu/~rcll/rcll55/55pdf/55Peluffo.pdf; depts.washington.edu/engl/ugrad/300aq01.html; www.caretas.com.pe/1998/1502/cultura/cultura.htm; www.pitt.edu/~press/books/vocesfemeninas.html - 5k; www.archinform.net/arch/3609.htm; 136.142.158.105/LASA97/lindstrom.pdf; departments.oxy.edu/history/ lsousa/history354/main3.html; www1.davidson.edu/academic/history/ historyweb/2004%20syllabi/Hst364.SyllabusF04.doc; encyclopedia.thefreedictionary.com/Clop+class+cruiser; guiadelcusco.perucultural.org.pe/todocush.htm; www.oberlin.edu/faculty/svolk/366f2000syllabus.htm; www.oberlin.edu/faculty/svolk/366f2000syllabus.htm; www.leabooks.com/Professional%20Books/Arts%20&%20Humanities/ Lit-Spanish-LatAm/Oxfod-99-Lat-Am-Sp.htm; www.mytermpapers.com/search/17517.html; www2.uerj.br/~pgletras/palimpsesto/aida.htm.
Esta muestra que resume las primeras cien páginas halladas hoy día, son sólo un pequeña parte entre 5650 páginas
Para muestra nos basta un botón, veamos: www.rena.edu.ve/terceraetapa/literatura/novelas.html, de Venezuela, donde citan a Clorinda y colocan su retrato, ¡Entre los más grandes novelistas del mundo!: Stendall, Flaubert, Balzac, Víctor Hugo, Dumas, Dickens, Zolá, E. Broutë, Mark Twain, Tolstoy, J. Isaacs y los que siguen. Es interesante ver que solamente citan a dos mujeres: Clorinda y Emily Brontë, la utora de “Cumbres Borrascosas”. Además, entre los latinoamericanos no están citados: Ciro Alegría, José María Arguedas y Mario Vargas Llosa.
Sin embargo, aún en internet, se siguen dando datos falsos, como que Clorinda nació en Paullo Chico, Calca; o que nació en 1854 y, peor aún, la hacen nacer en Tinta.
Los intelectuales cusqueños y en especial las escritoras mujeres, todos en conjunto, necesitamos recuperar a Clorinda, actualizarnos sobre lo que se viene trabajando y descubriendo acerca de ella, su vida y obra, y, sobre todo, es imperativo el imitar su militancia, su honestidad a toda prueba, su noble ambición de trascender a la mediocridad de su tiempo; enseñanzas suficientes, para tomarla como una dignísima bandera en la lucha por una humanidad mejor en un mundo más humano y solidario.
Cusco, 11 de noviembre del 2004.

EL PRESUNTO ATEISMO DE CLORINDA MATTO

EN EL SESQUICENTENARIO DE SU NACIMIENTO (2002)

Escribe : Julio Antonio Gutiérrez Samanez
Otra razón de fuerza para la postergación y olvido que sufrió la memoria y obra de Clorinda, ha sido una calumnia vil propalada por los sectores corruptos del clero, quienes no le perdonaron el haber sacado a la luz pública, la conducta inmoral de algunos sacerdotes. Que, por lo demás, ya había sido tema de la novela “El Padre Horán” de Narciso Aréstegui, muchos años antes que la aparición de “Aves sin nido” y para nadie eran desconocidas estas historias ya tratadas por Bocaccio en “El Decamerón”.
Pero la diferencia fue que Clorinda, en el proemio a su novela se atrevió a postular “el matrimonio de los curas, como una exigencia social”, eso originó en encono contra ella, por lo que la cucufatería, que no es lo mismo que la feligresía católica, se la tenían jurada desde 1889; para el año 90 Clorinda se hallaba en la dirección de la revista “El Perú Ilustrado”, la más importante de ese momento, y se dio el caso de que, en su ausencia, se publicara el poema “Magdala”, del Brasileño Coelho Netto, que era un cuento imaginario sobre Jesús y la pecadora de Magdala, en el cual importunado por esa mujer, el profeta de Nazaret salió ofuscado huyendo del pecado. Pese a las disculpas ofrecidas por Clorinda, la reedición de la revista sin el poema mencionado, etc. El Arzobispo de Lima, Antonio Bandini “adscribió a la categoría de pecado mortal la lectura de “El Perú Ilustrado”; el obispo de Arequipa “extendió la interdicción eclesiástica a la lectura de “Aves sin nido”, quemando los libros y una efigie de la escritora, en el que fue, probablemente, el último auto de fe realizado por los herederos de la inquisición. Desde el Cusco, el canónigo Pacheco escribió que habían remediado la afrenta “echando a las llamas el instrumento del ultraje”, es decir la revista.
Por lo que varios autores, coinciden que nunca hubo excomunión contra Clorinda, pero si una fuerte protesta, como se lee en la carta del Canónigo Pacheco: “ Aunque digáis señora, que Aves sin nido, es el grito de conmiseración para la raza indígena, Aves sin nido dirá también a las generaciones venideras que escarnecisteis a los ministros del Señor, en lo que tienen de más santo y más benéfico: el celibato y el misterio parroquial”. Una carta dirigida a Clorinda por las mujeres católica reza: “Señora, vuestro nombre llevado ayer en alas de la fama al templo de la gloria, es hoy el objeto de la execración de todos, y, particularmente, de las que pertenecemos a vuestro sexo…”
“Señora, no volvais a esta ciudad que tuvo la desgracia de daros el ser. De hoy en adelente, teneis un lugar allá lejos…En el oriente….Vos sabeis donde….No volvais Señora, por que vuestro nombre ha desaparecido de entre nosotros. Ayer, fue ignominiosamente quemado ante el pueblo apiñado que pedía, se convirtiera en cenizas vuestra efigie…Adios señora., vuestra nombre queda cubierto de eterno oprobio……”.
Noventa años después, las que quedaron en las cenizas del tiempo fueron esas personas, nada se sabe de ellas sus nombre si quedaron borrados para siempre, no merecieron ni el oprobio. Clorinda, en cambio, ha trascendido a la historia y a la gloria
Yo mismo sin saberlo sostuve la existencia de tal excomunión, pensando en los títulos de sus libros perdidos, “La excomulgada” y “Sevilla testamento póstumo”, donde quizás ella misma aclaraba el tema, pero ni Manuel E. Cuadros, ni Alberto Tauro, ni Carrillo, ni Tamayo ni el Dr. César Augusto Reinaga, encontraron el documento de tal excomunión. Quizás sólo se trató de una amenaza. Lo que si queda en claro es que su anticlericalismo sólo se redujo a atacar al mal cura y estar en desacuerdo con el celibato, porque, como dice Uriel García, Clorinda no se había despojado de sus prejuicios religiosos “pues, mientras propugnaba en sus obras un mejoramiento de la clase campesina y atacaba a un sector del clero, explotador tradicional del indígena, componía loas a la Virgen Santísima lo que no impidió a los santones cusqueños quemar en plaza pública su efigie y sus libros, como Omar o como Hitler –y tuvo el error de participar en la política militarista de 1894-95”.
Ya en el exilio, al emprender su “Viaje de Recreo” por Europa, visitó Coelho Netto, en Rio de Janeiro, quien le dice “Ud. Ha sufrido mucho en su patria a causa de la ofuscación de la gente que ha creído ver una herejía en mi poema Magdala”. A lo que Clorinda respondió “Verdad, ilustre Netto, pero no crea que en mi patria estuvieron todos ofuscados; allá hay hombres de mucha ilustración y de criterio sano; fue una campaña de frailes que por mercantilismo visten el hábito, como un tendero toma su guardapolvo para despachar detrás del mostrador, y eso ya pasó; hoy, en mi patria se me juzga con criterio muy diferente, y yo misma recibo los acontecimientos con temperamento distinto; después de esta visita a usted, he de visitar al Papa¸ en religión pasa lo mismo que en política; hay patriotas y patrioteros; yo respeto sólo al verdadero creyente, cualquiera sea su filiación o credo”.
En efecto en las páginas 157 – 159 , de “Viaje de Recreo” describe con emoción conmovedora encuentro con el Papa Pío X, cuya diestra besa, cosa que no haría una protestante, ni mucho menos una atea.
En el exilio bonaerense, Clorinda recordó el idioma de los incas, cultivado por ella desde la infancia y en contacto con la Sociedad Bíblica Americana, entidad evangélica o protestante, entre 1901 -1904, realizó una serie de traducciones de los evangelios al idioma de los incas, tales como: “Los hechos de los apóstoles”, el “Evangelio de San Juan”, el “Evangelio de San Lucas”, el “Evangelio de San Mateo” uno de los cuales comentó en su valiosa “Monografía de Calca” el ilustre clorindista Dr. Alcides F. Estrada. Aunque, Basadre asegura y Tamayo Herrera aventura como hipótesis la supuesta conversión de Clorinda al protestantismo, su visita al Papa, ocurrida en 1908, un año antes de su fallecimiento disipa toda duda.
En el sesquicentenario de su nacimiento ocurrido el 11 de noviembre de 1852, en esta ciudad del Cusco, recordamos a nuestra insigne paisana y la reconocemos en su real valía como la escritora peruana más importante de todos los tiempos, fundadora del indigenismo, reformadora y luchadora social, y la reivindicamos de todas las injurias que la intolerancia, la ignorancia y la ingratitud le mortificaran, injustamente, en vida.
Finalmente agradezco la bondad de la directiva de la Sociedad Procultura Clorinda Matto de Turner y en especial a la presidenta Sra. Teresa Flores de Paliza, por haberme invitado a pronunciar estas sencillas pero emotivas palabras de homenaje.

EL APORTE DE CLORINDA MATTO A LA LUCHA SOCIAL

En el sesquicentenario de su nacimiento (2002)
(Artículo publicado el el diario El Comercio del Cusco)

Escribe Julio Antonio Gutiérrez Samanez
La señora Clorinda Matto de Turner, novelista, literata, autora de importantes obras como la trilogía conformada por “Aves sin nido” (1889), “Índole” y “Herencia”, no fue sólo una escritora interesada en darle prestancia estética a su pluma. Clorinda fue una luchadora social, una reformadora que se enfrentó con singular valentía a la reacción civilista, clerical y retardataria de su tiempo. Una época signada por la ignorancia, el abuso, la ignominia y la decadencia que significó la derrota militar, la ocupación chilena y el desmembramiento del país. Es realmente increíble que una mujer cultivada, sensible, una esteta, haya tenido que lidiar con tanta fiera. Contra leguleyos y traficantes que la despojaron de sus bienes, su casa y propiedades después del fallecimiento de su esposo el ciudadano inglés José Turner, cuya tumba todavía queda intacta en el abandonado cementerio de Tinta.
Mientras aguzaba su intelecto descifrando antiguos manuscritos y crónicas de gruesos infolios o “Kharachos”, probablemente del autor de los Anales, Don Pedro Esquivel y Navia u otras fuentes, en la soleada Tinta, fue testigo de los bárbaros abusos de que eran objetos los indígenas, por parte de esa “Trinidad embrutecedora del indio”, Gobernador, cura y juez de paz; a la que hay que agregar al gamonal serrano de horca y cuchillo y derecho a la pernada.
Su insurgencia indianista no fue casual ni puro estetismo, o imitación de las corrientes de época del transito del romanticismo al realismo, ni fruto de sus lectura de las novelas francesas de Daudet o Zola, creer eso sería una burla a la inteligencia. Fue el brutal desencuentro con la realidad lo que la obligó a denunciar públicamente, lanzar un grito de horror, ante tanto abuso. Bien sabemos que en aquella época se dieron sublevaciones campesinas, que terminaron en masacres y el gamonalismo acrecentó sus campos despojando de sus tierras a los ayllus campesinos, para la cría de ganado lanar que el propio Turner exportaba a su país; los enganchadores también hacían lo propio, haciendo pagos adelantados para, después, apoderarse de la lana acudiendo a mil artimañas abusivas. Aun, en pleno dominio colonial, el Ayllu o comunidad indígena gozaba de protección de la autoridad española, pero expulsadas esta, los indígenas quedaron a expensas de la codicia de los verdugos terratenientes.
Atendiendo a la extracción social terrateniente de la familia de Clorinda, tales injusticias pudieron, muy bien, haber sido acalladas y justificadas. Ella estaba ocupada en sus investigaciones históricas para componer sus tradiciones, pero no pudo soslayar esos hechos ni fue indolente, por que su formación cristiana, católica y su cultura exquisita, la empujaron a denunciar y tomar partido por los desvalidos, los parias: los indios. Cosa que ni los más conspicuos católicos ni los más fervorosos creyentes, ni mucho menos los ministros de la iglesia, se animaron hacer.
¿Qué espíritu cristiano no insurgiría de indignación al ver a los propios malos curas, cometer delitos de simonía. Coludidos en la corrupción con las autoridades civiles?
Clorinda fue terriblemente vilipendiada por sus ideas sociales y políticas, hasta por sus propios paisanos, es por ello un acierto la afirmación de Efraín Kristal, sobre la “eliminación sistemática de las contribuciones de las mujeres a la cultura nacional realizada por los intelectuales de fines de siglo (XIX)”
Ese odio no fue gratuito, tampoco era sólo misógino, es decir de carácter sexista, era el odio de la oligarquía terrateniente contra alguien que se le enfrentó y espetó en el rostro la cruel explotación que se hacía con el indígena. Fue también la envidia que despertó por su temprana consagración en una Lima que detestaba a los provincianos, pese a ser todo ello, tan evidente, aún un historiador cusqueño como Tamayo Herrera, en su Historia del Indigenismo continúa denigrándola, con comentarios puestos entre paréntesis como por ejemplo:
“…seguidora (mal imitadora) de Ricardo Palma.; (no olvidemos que es mujer joven la que escribe); (no olvidemos que es una mujer y por eso exagera sus sentimientos), etc.
Cuando sabemos que Clorinda fue anatemizada, ridiculizada y atacada por personajes como Juan de Arona, acérrimo pierolista y el “civilista” Ventura García Calderón, este último decía que una generosa polilla destruía las novelas flojas de Narciso Aréstegui y de Clorinda a quien trata, aún después de muerta, “de costurera literaria, genio de la vulgaridad, que remendaba en prosa doméstica, epistolar, novelas, hasta que la muerte cortó el carrete de hilo y detuvo la máquina”. La generosa polilla prefirió comerse la obra de ese señorito con nombre de mujer y dudosa virilidad, por que la obra de Clorinda se viene publicando en todo el mundo y es un clásico de la literatura hispanoamericana, como se demuestra por las sus ediciones en Londres, Nueva York y Buenos Aires.
El fervor patriótico de Clorinda la hizo defensora de un régimen que hacía agua, y que cayó finalmente en manos del civilismo pierolista. Como resultado atacaron su casa, y asaltaron su imprenta donde editaba sus periódicos de apoyo a Cáceres. Clorinda tuvo que huir del país dejando todo, pero, por ironía del destino, la salida significó su triunfo internacional, su reconocimiento como luchadora social, reformadora y representante de las letras de Hispanoamérica. Como ocurrió cuando en 1908 viajó por Europa, recibiendo cálidos recibimientos y conquistando la simpatía del mundo culto que reconocía su obra, su talento y excepcional valentía. Mientras en su patria se la repudiaba y condenaba al olvido.
Han tenido que ser investigadores extranjeros, una mujer, la portorriqueña, Concha Meléndez quien en 1934, la rescató del olvido en su obra “La Novela indianista en América”, publicada en Madrid. Ahora sabemos que fue Clorinda la que puso sobre el tapete de la discusión política, el problema de la explotación inmisericorde del indígena, y por lo tanto la fundadora del indigenismo político y literario en América Latina.

EL TESTAMENTO DE CLORINDA MATTO DE TURNER

EN EL CENTENARIO DE SU FALLECIMIENTO (1909-2009)
“LA UNICA COSA SEGURA QUE TIENE LA VIDA ES LA MUERTE”

Escribe: Julio Antonio Gutiérrez Samanez.
(Artículos publicados en el diario El Comercio del Cusco)

En el número 15 de la Revista del Instituto Americano de Arte. Publicado en 1997, insertamos el presente artículo en homenaje a nuestra admirada paisana, la escritora e intelectual peruana más importante de todos los tiempos, cuya vida ejemplar de luchadora, reformadora social y periodista, se extinguió el 25 de octubre de 1909 en Buenos Aires, Argentina. Y que, ahora, estamos prontos a festejar, con júbilo, el sesquicentenario de su nacimiento en esta ciudad, el próximo 11 de noviembre.


En los primeros días de diciembre del presente año (1997), la Sociedad Pro Cultura Clorinda Matto de Turner, presentó dos obras importantes de esta escritora cusqueña: “Tradiciones Cusqueñas” y “Viaje de Recreo”, con tan importante motivo creemos que este trabajo, escrito hace un año y aún inédito, contribuirá al conocimiento de la vida de Clorinda en los momentos postreros de su ilustre existencia. He encontrado, por casualidad, en el “Baratillo”, la ya rarísima obra de Manuel E. Cuadros Escobedo: “Paisaje y Obra… Mujer e Historia: Clorinda Matto de Turner” De. H.G. Rozas, Cusco 1949. Cuadros, quizás , el mayor conocedor de la vida y obra de Clorinda el descubridor de su partida de bautismo, publicó en su libro la última carta que Clorinda escribió a su tía Guadalupe Usandivaras, haciéndole saber de su internamiento en un sanatorio para la operación, de la que sabemos, no logró sobrevivir. En ese documentado libro, que sólo conocíamos por las referencias que hacen de él, J.G. Cosio (1954), Tamayo Vargas y Pimentel Cáceres (1966), no encontramos sino alusiones al documento testamentario que aquí insertamos.

Por feliz acierto de la familia Giesecke Matto, el archivo del Dr. Alberto Giesecke, fue entregado en custodia al Centro Bartolomé de las Casas, beneficiando al Cusco y a su cultura con un fondo documentario de primer orden.
Revisando los legajos de cartas de este archivo hemos encontrado documentos que aportan al conocimiento de la vida y obra de Doña Clorinda Matto, el profundo amor a su ciudad natal, su solidaridad militante con la causa de la mujer desvalida y su valerosa y decidida actitud frente a las fatalidades de la vida, virtudes que la rodearon durante toda su heroica y ejemplar existencia.

El ilustre Rector Dr. Alberto A. Giesecke, casó con Esther Matto Usandivaras, prima hermana de Clorinda el 19 de enero de 1914, de ese modo emparentó con la familia de la egregia escritora cusqueña, fallecida en Buenos Aires el 25 de Octubre de 1909.

Clorinda, luego de su periplo europeo, descrito minuciosamente en su obra póstuma “Viaje de Recreo”, enfermó gravemente y tuvo que ser intervenida quirúrgicamente. Antes de someterse a la fatal operación, intuyendo el desenlace, dejó una carta y testamento a su mejor amiga, la escritora argentina Zoila Aurora del Campo.
El 20 de octubre Clorinda escribió a su tía Guadalupe lo que sigue:
“Buenos Aires, octubre 20 de 1909.
Sra. Guadalupe U. de Matto.
Cusco.
Querida Guala:
Hace tiempo que nada se de ustedes. Me consuelo pensando que por haberse prolongado la estadía en Urubamba no tendré cartas. Dios quiera que todos gocen de salud. Yo no puedo decir que voy bien. He pasado un invierno doloroso y ahora mis médicos dicen que necesito operarme un tumor interno en el vientre. Esta tarde iré a un sanatorio donde una de las grandes mentalidades médicas de este país que es el Dr. José M. Caballero, y quedo, pues, confiada al resultado de la operación. Me ven tres médicos y todos opinan por la necesidad de la operación con toda probabilidad de éxito satisfactoria. Pero, como la única cosa segura que tiene la vida es la muerte, yo no dejo de ponerme en este caso, y te escribo la presente horas antes de marchar al sanatorio Carrasco para decir que en estos momentos tristes pienso en ustedes con toda mi alma. Si llegase el caso fatal que aún no espero, porque estoy fuerte, mis amigas las señora Isolina S. de Centeno, Aurora del Campo, Srta. Rosa Scorza, te escribirán comunicándote el tenor de mis disposiciones que las he dejado en testamento cerrado.

No vayas a ponerte afligida por esto. Yo sólo prevengo las cosas por estar sola y lejos de la patria. No preveo nada de peligro porque cada día se hacen estas operaciones aquí.

Mil saludos y cariñosos a mis primos y primas y un abrazo de tu sobrina.
Clorinda.
(Carta tomada del artículo “C.M.de T. su vida…” por: Eduardo Pimental C. Rev.”Ciencias y Artes”, Cusco 1966).

Después del trágico suceso, la amiga mantuvo correspondencia con la tía de Clorinda, Sra. Guadalupe Usandivaras de Matto, hermana de su madre y madre de la esposa del Dr. Giesecke. He aquí las cartas del archivo:
“Octubre 20, 1909
Querida Aurora:
Haga llegar a su destino las tres cartas adjuntas:
El pequeño escritorio portátil que está sobre mi escritorio de trabajo y el tintero de mármol aún sin estrenar deseo que conserve usted como recuerdos míos.

No dudo que todas las chucherías de mi mesa de trabajo serán estimadas por mi familia y amigas y así pido que mande a Josefina y David todo lo que fuese de fácil remisión. Que no me olviden.
Adiós.
Clorinda”


EN EL 93 ANIVERSARIO DE SU FALLECIMIENTO
EL TESTAMENTO DE CLORINDA MATTO DE TURNER
Escribe: Julio Antonio Gutiérrez Samanez
(Fragmento)
……………………………………………………………………………………………………Encargo a mis amigas Isolina S. De Centeno y Señorita Rosa Scorza la cajita que dejo a Isolina, rotulada para mi hermano el Dr. David Matto, le será remitida con seguridades.

Mi escritorio lo dejo como recuerdo a mi amiga Isolina de Centeno.
Los dos estantes bibliotecas que están a los costados del escritorio a mi amiga Rosa Scorza.

Todo el servicio de mesa y cristalería le será remitido a mi hermano el Dr. Matto. La cómoda y una de las mesitas de luz, la que no forma juego con el ropero de mi dormitorio dejo a mi sirvienta Filomena Conde.

La libreta de compra de dos lotes de terreno en villa Albertina, corresponde a Rosa Scorza. Pido que nuestras amigas Isolina y Rosa se encarguen de inventariar los muebles para venderlos y quemen todos los papeles manuscritos que están en distintos cajones de mi escritorio.

Todos mis libros encuadernados los dejo a la Biblioteca de la Universidad de La Plata. La lámpara de proyecciones luminosas y de placas dejo a la Escuela Comercial de Mujeres donde he trabajado tantos años.

La casa Sempere de Valencia debe remitir a mi orden dos mil ejemplares de mi libro de viajes que está editando a medias conmigo. El valor de estos llegará a seis mil pesos pues el precio de venta está fijado en tres pesos. Encargo que mil ejemplares se ponga a la venta en ésta, aplicando su producto en dotar a la primera criatura mujercita que ingrese en la cuna de huérfanos el día de mi fallecimiento y los otros mil serán mandados al Perú para aplicar su producto al Hospital de Mujeres de la ciudad del Cuzco.

Buenos Aires, Octubre 20, 1909.
Clorinda Matto de Turner”

De la lectura de las otras cartas se deduce que a este documento le falta el encabezamiento, hoja que no obra en el archivo, en el cual habría otras disposiciones de la testamentaria. Reza un párrafo de una carta de Zoila Aurora del Campo a la Sra. Guadalupe, del 10 de enero de 1910.

“…supongo que por el Dr. Matto ya sabrá usted que Clorinda en su testamento deja dos mil pesos moneda argentina para cada una de sus primas Grimanesa y Esther”.
En otra carta del 6 de setiembre de 1910, informa sobre el estado de lo dispuesto por el testamento, el alquiler de la casita de Clorinda (Calle Rincón 611) y que”… el día 7 de Agosto pasado despachó al Sr. Estrada para Lima, todo el equipaje de Clorinda suponemos habrá llegado bien”.

De modo que de no haber ocurrido otra cosa, las pertenencias de la autora de “Aves sin Nido”, “Indole” y Herencia”, quizás con los originales de sus obras perdidas: “La Excomulgada” y “Sevilla, Testamento Póstumo”, si no fueron incinerados, deben obrar en los archivos de la familia del Dr. David Matto, quien fuera parlamentario por el Cusco en la segunda década de este siglo.
Vemos pues, en este botón de muestra, la enorme importancia del valioso archivo que, con el mayor esmero, custodia el Centro Bartolomé de las Casas.

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Hace algunos días visitamos el hogar de don Miguel H. Milla y la Dra. Delia Vidal, y pude ver que ellos guardan documentos de los tratos comerciales entre la escritora y el señor Fortunato Unda, abuelo materno de la Dra. Delia y del recordado Dr. Humberto Vidal Unda, se trata de los años en que Clorinda, durante su estadía en Tinta, saldaba las deudas de los negocios dejados por su difunto esposo el ciudadano inglés José Turner. Clorinda estuvo asociada con el señor F. Unda, en la explotación de unos molinos en Mosoqllacta de la hacienda “Urubambilla”.
Epoca en que, con seguridad, la escritora estuvo componiendo su novela “Aves sin Nido”.
Cusco, enero de 1997.